Es del conocimiento común, aún
entre las masas, que las Brujas practican magia. Puede haber ideas
distorsionadas acerca del tipo
de magia practicado, pero la Bruja es firmemente
asociada, en la cultura popular, a los artes mágicos.
La Wicca es, una religión que
engloba la magia como uno de sus conceptos básicos. Esto no es extraño. En
verdad,es normalmente difícil distinguir donde termina la religión y donde
comienza la magia, en cualquier fe. Aun así, la magia tiene papel especial en
la Wicca. Ella permite mejorar nuestras vidas y devolver energía a nuestro tan
maltratado planeta. Los Wiccanos también establecen relaciones especiales con
La Diosa y con El Dios por medio de la magia. Esto no quiere decir que todo
encantamiento es una oración, ni son las invocaciones encantamientos con
palabras diferentes. Al trabajar con las fuerzas que el Dios y la Diosa
encarnan, nosotros nos aproximamos de ellos.
El acto de llamar por sus nombres
y visualizar su presencia durante los encantamientos y ritos crea un eslabón
entre el Divino y los humanos. Así, en la Wicca, la magia es una práctica
religiosa.
La magia es la proyección
de las fuerzas naturales para generar efectos necesarios.
Hay tres fuentes principales de
tal energía - el poder personal, el poder de la Tierra y el poder divino.
En la magia, el poder personal es
generado, imbuido de un propósito específico, liberado y direccionado a su
objetivo.
El poder de la Tierra es lo que
reside en el interior de nuestro planeta y en sus productos naturales. Piedras,
árboles, el viento, las llamas, el agua, cristales y aromas poseen poderes
únicos, específicos, que pueden ser utilizados durante rituales de magia.
Tanto el poder personal como el
de la Tierra son manifestaciones del poder divino. Esta es la energía existente
en la Diosa y en el Dios - la fuerza vital, la fuente del poder universal que
creó todo aquello que existe.
¿Cómo funciona esto? A partir del
momento que decido practicar un acto de magia, estoy operando magia. Pensar
sobre magia pone el poder personal en movimiento. Durante todo el proceso -
agrupar el material, diseñar la cuenta, encender la vela, visualizar – estoy despertando
y imbuyendo mi poder personal con mi necesidad mágica. Durante el propio ritual,
libero ese poder en la vela. Cuando finalmente quemo el dibujo, la última de
esas energías es liberada e inicia el trabajo para que me sea posible pagar la
cuenta.
Puedo no ser capaz de decir
exactamente como la magia funciona, pero sólo que ella de hecho funciona.
Felizmente, no necesitamos saber de eso; basta que sepamos cómo hacerla funcionar.
No soy perito en electricidad,
pero puedo conectar mi tostadora en la toma y tostar mi pan integral. De igual
manera, en la magia nosotros nos "conectamos" a la energía que nos circunda
y nos rodea.
Hay, literalmente, miles de sistemas
de magia, aún entre los propios *Wiccanos. Por ejemplo, existen incontables
modos mágicos de trabajar con cristales, hierbas o símbolos, y combinándolos se
crean aún más sistemas.
Tales sistemas no son necesarios
para la práctica bien sucedida de magia. Practicar magia con la mera
manipulación de instrumentos como piedras y cristales es ineficaz, pues el verdadero
poder de la magia está dentro de nosotros mismos - el don del Divino. Por lo
tanto, no importa cuál sea el sistema de magia, debemos infundir el poder personal
a la necesidad, y enseguida liberarlo. En la magia
Wiccana, el poder personal
es reconocido como una conexión directa con La Diosa y con El Dios. La Magia,
por lo tanto, es un acto religioso con el cual los Wiccanos se unen a sus
deidades para mejorarse a sí mismos y a su mundo.
Es relevante decir - la magia es una
práctica positiva. Los Wiccanos no practican magia destructiva, manipulativa o
exploratoria. Una vez que reconocen que el poder activo en la magia es, en su
esencia, proveniente de la Diosa y del Dios, prácticas negativas constituyen un
verdadero tabú. Magia "maléfica" es un insulto a sí mismo, a la raza
humana, a la Tierra, a la Diosa y al Dios, y al propio universo. Las
consecuencias pueden ser inimaginadas. La energía de la magia es la propia
energía de la vida.
Cualquiera puede practicar magia
- dentro de un contexto religioso o no. Si ciertas palabras o gestos surgen en
su mente durante un encantamiento y parecen adecuados, úselos. Si no encuentra
un ritual que le agrade o que sea apropiado para sus necesidades, cree uno. No
es necesario escribir bellas poesías o crear coreografías para treinta
bailarines portando incienso y trece sacerdotisas cantantes. Por lo menos,
encienda una vela, acomódese delante de ella y concéntrese en su necesidad mágica.
Confíe en sí mismo.
Si realmente desear conocer la naturaleza
de la magia, ¡practíquela! Muchos temen a la magia. Aprendieron (con no
practicantes) que ella es peligrosa. No tema. Atravesar la calle también es
peligroso. Pero, si *se hace del modo correcto, todo bien.
(Scout Cunningham-Guía Para El Practicante
Solitario).
Mi pequeña opinión:
La magia para mi, es la
manipulación de la energía para crear cambios en nuestras vidas o en las de los
demás. Debe de usarse con el fin de hacer cambios positivos, nunca para
perjudicar a otra persona o hacer magia para alguien sin su permiso.
También quiero agregar que hay
que ser realistas en cuanto a los trabajos mágicos, porque hay personas que o
en todo quieren usar la magia o desean que a través de un trabajo
mágico se realicen
cosas imposibles (Como ganarse la lotería, o casarse con una celebridad). Hay
que ser responsables con lo que hacemos, y consientes que la magia es una ayuda,
pero no para todo el tiempo y en todas las cosas. Si se está enfermo, si
podemos usar magia para mejorarnos, pero también por lógica hay que acudir a un
Medico. No dejemos todo en manos de la magia, seamos realistas y responsables
que por eso muchos nos toman de charlatanes (Por que, hay muchos que solo lo
hacen para sacarle provecho). Si piensas
estudiar brujería, hazlo con responsabilidad, pagano o no. El “arte” está muy desprestigiado,
así que hay que fomentar la brujería con responsabilidad y tomar conciencia de
la magia real.